When I met you I thought exactly this. I listened to this song and felt it was meant for us, We were beautiful together, like magic power ready to come out. But suddenly words intruded among my aspirations, and I inhibited myself. Everything that came next was prey of fear. We were shining though. That’s the spark I want. The one that could arise in the meeting of yours and mine.
Lo que no debía ser
Lo que no debía ser
Creía que podía caminar sobre el agua,
mientras los caracoles susurraban
es imposible que se amen.
Me rebelaba como una ola
y volvía aunque los corales
entonaran un NO.
Las gaviotas soplaban
lo suyo es un error,
Y yo me reía y volvía a sumergirme
en un manto tejido con mis historias,
donde vivíamos lo imposible,
y llegábamos a la cima.
Los peces burbujeaban
eso no está escrito en ninguna piedra,
entonces emergía y tallaba mis granitos de arena,
danzaba sobre ellos dibujando una historia paralela.
Creía poder cambiar el curso del destino,
pero un faro a lo lejos
me llamaba para que volviera a mi costa,
donde vos no estabas,
Y yo tenía otra historia escrita en la arena.
Te regalo un momento
Te regalo un momento, corto o largo,
ancho o estrecho, flaco o pesado.
Te regalo un espacio libre de mí,
lleno de aire, solo con vos.
Podés usarlo como quieras,
mirarlo y ver la ciudad a través de
sí, o caminarlo, atropellarlo, inundarlo.
Te regalo un tiempo,
junto a ese espacio libre de mí.
corto o largo, vacío o lleno
de lo que vos quieras,
el aire forma cajitas de
recuerdos tristes o alegres,
según prefieras.
Te regalo un espejo
transparente, para que
lo pongas enfrente tuyo.
Que veas tu reflejo,
la parte que sale de vos
y alcanza a tocar la luz.
Puede que no te veas,
y entonces sabrás que
sos un vampiro.
Puede que descubras
a tu alma atrapada allí,
del otro lado del cristal,
o que atrapes a tus demonios,
debajo del aluminio.
Que respondas tus preguntas
o que te abrume el silencio.
Que veas allí a Venus o a Tierra,
y sabrás de qué lado estás.
Te regalo un espejo para que
lo dobles en cuadraditos y
lo guardes en tu bolsillo.
Que te sirva para descubrir
pelusitas incrustadas en tus ojos,
liberar gotas de sal
y guardarlas en el reflejo.
Te regalo un frasquito con agua
de glaciar. Para que la lleves a
la montaña y la dejes fluir con
el arroyo que baja de la ladera.
Para que sumerjas tus manos y refresques
tu cara. Sientas su frescura,
cristalina y serena,
bajando por tus sienes y tus mejillas,
mientras de a poco sube el sonido
de la cascada, la música del agua.
Dejá que lave las cenizas que oscurecen
tu rostro endurecido por el fuego, ese ardor
constante que oprime de tu pecho.
Dejá que el agua se meta por tus poros
Y sea parte de vos.
Luego volvé a mirarte en el espejo,
y decime qué ves.
Luciérnagas
Esta tarde pasó algo extraordinario, abrí la ventana y frente a mis ojos desfilaron una serie de imágenes extravagantes, una seguida de la otra como si estuvieran tomadas de la mano, inseparables entre sí, acompañadas por el espacio exterior, siempre negro azabache color a calma de cualquier dolencia viva. Como dormirse dentro de un sueño y realmente quedarse dormido, cuando cerrar los ojos realmente aplaca a un dolor que ataca muy fuerte. Cuando se llena el vacío de colores centelleantes, y sin embargo sigue siendo de noche, porque sigue habiendo una diferencia entre los seres luminiscentes y el día; unos brillan en la oscuridad, otro es la luz que la enciende, y no puedo sino preguntarme y preguntarle al gusano de seda que según Alicia fuma en pipa, pero yo sé que teje vestidos de noches extremadamente suaves, cómo es que el sol siendo una estrella crea el día, y las otras estrellas son luciérnagas hermosas que hacen danzar a las mariposas nocturnas bañadas en lentejuelas.
Seguía siendo de noche, pero la noche brillaba, y esto es lo que vi……..
2 do Mix Contemporáneo
Mix contemporáneo
¿Y qué hay del arte que se está haciendo en este preciso momento?, Ya hemos navegado por una gran gama de obras pasadas, recorriendo todos los estilos, técnicas, y artistas más y menos reconocidos, con una serie de galerías que abarcaron las obras más impresionantes. Ahora es momento de comenzar a recolectar las mejores piezas que los artistas van dejando desparramadas por ahí…
Desde hace unos días mi gato negro
está raro. Se encariñó con la puerta,
quiere salir corriendo a ver cual es el misterio
del otro lado. A la noche rasga la puerta e intenta
agarrar las llaves. Cuando duermo en el sillón
me maúlla despacito como una nana, porque
no entiende lo extraño de todo aquello.
Galería Mágica 29° edición
Peter Von Cornelius (1783-1867) fue un pintor alemán romántico. Junto con Johann Friedrich Overbeck son los dos más conocidos de este estilo. En 1811 decidió unirse a la Hermandad de San Lucas cuando entabló amistad con Overbeck. Esta hermandad fue constituida para el estudio y el aprendizaje de la pintura y de la que formaban parte, entre otros, Schadow, Veit, Schnorr y Ludwig Vogel.
Johan Friedrich Overbeck (1789-1869)
Triunfo de la religión en las artes:
Autoretrato de Overbeck con esposa e hijo:
Rerrato del pintor Franz Pforr, miembro de los nazarenos:
Franz Pforr (1788-1812)
Naturaleza romántica de Caspar
Caspar David Friedrich (1774-1840) pintor alemán paisajista romántico.
Friedrich, hombre de su tiempo, no podía sustraerse a las ideas sobre lo sublime, lo bello y el infinito, planteadas por el autor inglés Edmund Burke. Según él lo bello produce placer y lo sublime terror. Ambos suelen ir juntos y el terror asociado a lo sublime se despierta con mayor facilidad mediante las cosas que son inciertas y confusas, entre las cuales está la idea del infinito. Friedrich parece haber sido el pintor romántico que mejor ha representado estas ideas ya desde sus primeros óleos, como el Monje junto al mar y Abadía en el robledal, ambos concluidos en 1810 y conservados hoy en la National Galerie de Berlín.
El teólogo Friedrich Schleiermacher, coetáneo suyo, sostenía que los artistas “son los nuevos monjes […] que se esfuerzan por inflamar el amor por las cosas más elevadas […] Son el más alto sacerdocio que transmite los secretos espirituales más profundos” y también que el conocimiento consciente de Dios “es más bien un deseo de perderse uno mismo en el infinito que de preservar el propio ser finito”.
El propio Friedrich dejó escrito: “la persona noble reconoce a Dios en todas las cosas, la persona corriente sólo ve la forma, no el espíritu”. Acerca de la obra de Friedrich el escultor Pierre-Jean David D’Angers comentó «Friedrich, hasta ahora el único pintor de paisajes que ha tenido el poder de conmover cada facultad de mi alma, el único que ha creado un nuevo género: la tragedia del paisaje”.
Perteneció a la primera generación de artistas libres, que no pintaban por encargo, sino que creaban por sí mismos para un mercado libre de galerías.
A su juicio, el arte debía mediar entre las dos obras de Dios, los humanos y la Naturaleza. Con este punto de vista se acerca a las bellezas naturales, en cuya representación procesó tendencias y sentimientos. Sus obras no son, por lo tanto, imágenes de la Naturaleza, sino de un sentimiento metafísico, inaprensible. El primer plano y el fondo, separados a menudo por un abismo, se relacionan entre sí.
Pobló sus paisajes de seres humanos contemporáneos, pertenecientes en general a la burguesía. Estas figuras, a partir de 1807, suelen aparecer de espaldas al espectador, ocultando la cara, y en alguna de ellas se reconoce al propio Friedrich. Suelen estar ubicados céntricamente en el cuadro, de manera que cubren el punto de fuga. Con este recurso, el artista señala que el «sentimiento», la auténtica humanización, se encuentra en la Naturaleza. Al mismo tiempo, esto permite que el espectador no se distraiga con la fisonomía de este personaje anónimo, sino que se identifique con él. Finalmente, de esta manera logra una metáfora visual de la disolución del individuo en el «todo» cósmico.